viernes, 20 de junio de 2008

LOS AMIGOS DE MARIO PARTE CUATRO

Seguimos con la entrevista que Ecos de la Costa le hizo a Jesús Orozco, vamos en la página dos de seis y Orozco le sigue ayudando a Mario.

Jesús Orozco dice: “¿qué se puede esperar de alguien que en el transcurso de su vida lo que ha hecho frecuentemente ha sido traicionar a sus amigos y a quienes le ayudaron para que figurara políticamente?

Sería saludable para esta discusión, que Jesús Orozco dijera a quiénes he traicionado políticamente, que diga a qué amigos he traicionado, que me de un solo nombre y si no los aporta, seguirá acreditando que es un mentiroso.

Si de traiciones se trata, Jesús Orozco, traicionó a su partido, a los que dentro del PRI votaron por él, a los exgobernadores que lo ayudaron en su carrera política y si dice que traicionó al PRI y su carrera dentro del priísmo, que le dio todo lo que tiene, por el enfrentamiento conmigo, quiere decir que el odio que me tiene, es más grande que sus principios y que su gratitud a lo que el PRI le dio y a los priístas que lo apoyaron en toda su carrera. Dejar todo por odio explica por sí sólo su carácter y su pasado nada transparente y, sobre todo, el miedo a la pobreza que ha motivado su ambición en el desempeño público y el deseo de retornar al presupuesto.

Jesús Orozco dice: “en el transcurso de esa vida (la de FMP) –y hay testimonio de ello– lo que ha hecho es congraciarse hasta la abyección con quienes tuvo una profunda enemistad. Los casos de su amistad con Héctor Sánchez y Roberto Madrazo”.

Héctor Sánchez fue mi compañero en la preparatoria y durante muchos años llevamos una buena amistad, la cual se rompió cuando el licenciado Humberto Silva Ochoa, siendo rector de la Universidad de Colima, compró el Ecos de la Costa.

Antes de este hecho, Humberto Silva llevaba una excelente amistad con Héctor Sánchez, tan es así, que en el sexenio de doña Griselda Alvarez, cuando la exgobernadora dejó de dar publicidad a Diario de Colima y lo mismo hicieron los ayuntamientos, Humberto Silva fue invitado también a sumarse a esa estrategia y el entonces rector no aceptó, precisamente por la importancia del Diario de Colima y por su amistad con Héctor Sánchez, y además, en aquella ocasión Humberto comentó que suspendiendo la publicidad no se arreglaban los asuntos con los periodistas. Después, Héctor Sánchez hizo una gran amistad con doña Griselda Alvarez, que se ha acrecentado a lo largo de los últimos 25 años.

Mi distanciamiento con Héctor Sánchez, terminó en octubre de 1997, cuando reanudamos la amistad interrumpida y como también Humberto Silva la reanudó con Héctor Sánchez durante mi gobierno, infinidad de veces nos reunimos juntos a cenar o a comer los tres, de manera amistosa, es más, como aspirante a la gubernatura, visitó las oficinas del Diario de Colima y fue entrevistado por Héctor Sánchez. Nuevamente, la amistad de Humberto Silva y Héctor Sánchez se rompe después de la muerte de Gustavo Vázquez, precisamente cuando un grupo de personas ya muy identificadas, se apoderaron del Ecos de la Costa, encabezados por Luis Ignacio Villa García, Salvador Silva y otros colaboradores menores de ese periódico, que utilizaron el Ecos de la Costa para sus propios fines y despojaron a Humberto de su capacidad decisoria en dicho periódico.

Durante los últimos 11 años, mi amistad con Héctor Sánchez ha sido cada vez más sólida y además, yo he compartido sus enemigos y él los míos, y en la mayoría de las ocasiones los hemos combatido juntos. En realidad, más que interés económico o político, con el señor Héctor Sánchez me unen la amistad y los enemigos comunes que tenemos.

La base de nuestra relación amistosa se basa en el trato permanente y en las coincidencias que tenemos, jamás en complicidades, porque nunca hemos sido socios, como tampoco hemos estado subordinados el uno al otro, siempre hemos sido libres e independientes, sin dueño que nos subordine o condicione, y en varias ocasiones hemos tenido puntos de vista diferentes y ahí están publicados, nuestra amistad ha durado porque no tenemos conflicto de intereses ni de objetivos: él es un exitoso empresario periodístico y yo político de tiempo completo.

Somos amigos, pero no correligionarios, pues no nos une un objetivo político.

Sobre el caso de Roberto Madrazo, vale la pena precisar que fuimos compañeros de legislatura hace 32 años, y siempre mantuvimos una relación afectuosa y de respeto, aunque políticamente no compartí muchos de sus proyectos.

En la elección interna del PRI en 1999, en la que participaron Labastida y Madrazo, participé apoyando a Labastida como lo hicieron todos los gobernadores del PRI, porque, así era el acuerdo y el compromiso político.

En el 2002, en la elección interna por la presidencia del PRI en la que contendieron Roberto Madrazo y Beatriz Paredes, apoyé a Beatriz y en Colima, Beatriz ganó, como en el 99 ganó Labastida.

En ninguna de esas contiendas ataqué a Roberto Madrazo. Repito: no participé en sus proyectos y siempre lo expresé de manera abierta, como a él le consta.

No obstante lo anterior, Roberto Madrazo tuvo la generosidad de invitarme a su proyecto por la presidencia de la república y me nombró delegado en varios estados de la república: Tamaulipas, Hidalgo y Nayarit y al inicio de su campaña presidencial, me invitó a ser su coordinador de giras y después me propuso ante Mariano Palacios Alcocer para ocupar el cargo de Secretario de Elecciones del Comité Nacional. Si hubiéramos sido enemigos en alguna ocasión, seguramente esto no hubiera ocurrido, pero Madrazo siempre supo la razón por la que no participé a su lado en el 99 y en el 2002 y conservo con él una excelente relación amistosa y él ha hecho público el reconocimiento a mi trabajo político, como consta al citarme positivamente en varias ocasiones en su libro publicado recientemente.

Apoyé a Labastida cuando fue candidato presidencial, apoyé a Madrazo cuando fue dirigente del PRI y cuando fue candidato presidencial, como ahora apoyo y respaldo a nuestra dirigente nacional Beatriz Paredes, apoyé la candidatura de Gustavo Vázquez y de Silverio Cavazos, siempre he apoyado a mi partido a sus candidatos y a sus dirigentes, nunca he traicionado a la militancia ni a mi partido; por el contrario, fui acusado de una obviedad, siendo gobernador priísta: de apoyar a los candidatos del PRI.

Existe una resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación que resolvió que apoyé al PRI en la elección del PRI y de que critiqué a los enemigos del PRI. Y los hechos dicen que el PRI ganó.

Jesús Orozco no puede acreditar esa lealtad al PRI en el que militó y que le dio todo lo que tiene, ni a su militancia, que votó en tres ocasiones en favor de él como candidato priísta y dos veces en contra, las dos veces que se enfrentó a Gustavo Vázquez y las dos veces perdió. Nunca ha ganado fuera del PRI.

Me gustaría preguntarle a Jesús Orozco: ¿con qué exgobernador, de doña Griselda a la fecha lleva buena amistad? Y todos le ayudaron. Lo hizo doña Griselda Alvarez, pues le dio su primer empleo y le pagó sus estudios en Europa, lo ayudaron Elías Zamora y Carlos de la Madrid Virgen, sería bueno que en esta discusión de amistades, lealtades y traiciones, Jesús Orozco nos diga, con cuales de los exgobernadores que le ayudaron en su carrera política mantiene una buena relación amistosa, o mantuvo hasta antes de salirse del PRI.

Dice Jesús Orozco: “la animadversión que le tiene Moreno Peña “y que ya colinda con un odio irracional”, data desde cuando él fue postulado como candidato a gobernador en 1997 y que compitió por la postulación precisamente con el entonces senador.
“Recordó que cuando Moreno Peña resulta nominado candidato por una decisión del presidente Ernesto Zedillo “y no por una decisión democrática”, se encargó de andar diciendo “que a raíz de su rectorado tenía tanta fuerza, que iba a arrasar en Colima, que se llevaría carro completo”,

Efectivamente: llegué a candidato a la gubernatura por decisión de Ernesto Zedillo, en la forma en que entonces se decidían en el PRI todas las candidaturas, como a él lo designó candidato a senador Carlos Salinas de Gortari y candidato a presidente municipal, Carlos de la Madrid Virgen y candidato a diputado plurinominal, Francisco Labastida, como él mismo lo confiesa. JOA dice que mi candidatura no fue una decisión democrática, y tiene razón fue una decisión presidencial, decisión que él buscó a su favor y no alcanzó, aspiraba también a que la decisión presidencial fuera a su favor, y no lo fue.

El Doctor Zedillo es economista, como lo es Jesús Orozco, y no confió en él, como tampoco lo hizo Liébano Saenz, que era su amigo y fungía como secretario particular del presidente Zedillo, y no le pudo ayudar porque, sencillamente, su paso por la aduana de Manzanillo y el ayuntamiento de Colima, lo hacían un candidato no fiable, confiable y ganador.

Las encuestas que hacía Liébano Saenz reflejaban que si Orozco hubiera sido candidato perdería la elección, por eso fui yo el candidato, sobre todo por el trabajo por la universidad, que fue mi mejor aval y a Jesús le perjudicó su pasado en el servicio público.

Reconozco que es cierto que durante la campaña de 1997 dije que íbamos a ganar con carro completo, todos los candidatos lo dicen, sólo los tontos dicen que van a perder. Jesús Orozco dijo que iba a ganar la interna en contra de Gustavo y también dijo que iba a ganar la constitucional y perdió ambas elecciones. Ahí están sus declaraciones en la prensa.

Mi paso por la universidad avaló mi candidatura y está a la vista de todos: edificios académicos, laboratorios, bibliotecas, 8 museos, 4 polideportivos, alberca olímpica, calidad académica, posicionamiento internacional de la universidad, discos compactos, etc. etc.

El paso de Jesús Orozco por la aduana de Manzanillo ahí está: el Chimborazo y el Córdova, la gran regularización de vehículos, y su paso también por el ayuntamiento de Colima, ahí está el fraccionamiento Lomas Verdes y la venta de los lotes a sus amigos, etc. etc.

Dice Jesús Orozco que siento una gran animadversión. La verdad es que a mí no me despierta otra cosa y más que eso, es rechazo por la forma como utilizó el servicio público.

Dice Jesús Orozco que yo declaré durante mi campaña en el 97 que para ganar, no los necesitaba ni a él ni a su grupo, y por eso no se sumaron a mi campaña y que ahora me quejo. No hay queja, solo lo refiero como una prueba de que Mario y sus amigos dentro del PRI no apoyaron al PRI ni a sus candidatos en 1997 y Mario formaba parte de ese grupo, ahora lo confiesa, los hechos lo acreditan y su confesión lo prueba: que gané la elección sin ellos. En consecuencia, no pueden acusarme de que necesité de su apoyo, de su ayuda o de su voto para ser gobernador.

No obstante lo anterior, y aunque Jesús afirma que no dejé participar a sus amigos durante mi gobierno, Rogelio Rueda fue presidente del PRI en Manzanillo y candidato a presidente municipal, así como candidato a diputado federal. Armando fue secretario general del PRI y diputado plurinominal y Mario fue Contador Mayor de Hacienda y después, candidato a diputado local y Jesús Orozco fue candidato a diputado federal plurinominal y no pudieron haberlo sido sin mi consentimiento, porque ellos mismos reconocen que todos los candidatos los ponía yo y que por eso nos fue mal en las elecciones. ¿Entonces qué: los designaba o no?

Con este tema mañana continuamos, sí, mañana sábado.

A Propósito

1.- La carta de Jesús Orozco a Héctor Sánchez merece unos buenos comentarios. Eso será la semana que entra.

2.- El editorial de ayer del Ecos de la Costa, y sus dos columnas más afamadas, me los dedican íntegramente, todo como parte de su estrategia de ayudar a Mario Anguiano. No me distraigan: todavía estoy dando respuesta a la entrevista de Jesús Orozco y a los amigos de Mario.

Se respeta la fila.

Con calma y orden, a todos les tocará su turno.

aproposito2004.blogspot.com

3 comentarios:

Unknown dijo...

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Unknown dijo...

LIC. FERNANDO MORENO PEÑA ME GUSTARIA POR ESTE MEDIO SOLICITARLE UNA ENTREVISTA PARA MI MEDIO www.hoyenmanzanillo.com EN EL DIA QUE ME INDIQUE.

Unknown dijo...

ME PUEDE CONFIRMAR AL CORREO: computochofer@hotmail.com
LOPEZ MATEOS 106 COL. LAS JOYAS
MANZANILLO COL. TEL 013143322822