1.- El secretario de la Función Pública, Salvador Vega Casillas, estuvo el miércoles de la semana pasada en Colima para presentar, ante líderes de organizaciones sociales locales, los nuevos esquemas de trabajo de esta dependencia federal y firmar un convenio con el Gobierno del Estado para la revisión de los fondos específicos de carácter federal que maneja el estado como son, entre otros, Alianza para el Campo, Hábitat, los de Comisión Nacional del Agua y otros.
La visita de este secretario, sirvió para que se pusiera en operación una estrategia de comunicación que confundiera a los ciudadanos colimenses y les hiciera creer que el secretario Salvador Vega había venido a informar sobre una auditoria que no hizo del presupuesto estatal que maneja el gobierno del estado, que es de más de siete mil millones de pesos y hacer creer también que se había auditado y revisado el endeudamiento que por casi tres mil millones de pesos, contrajo la administración del licenciado Silverio Cavazos Ceballos.
El manejo de la información, que es un diseño implementado por el actual coordinador de comunicación social del gobierno del estado, René González, instrumentado desde el gobierno anterior a través del periódico Ecos de la Costa que él dirigía, se ha venido replicando en la actual administración gubernamental, porque él lo diseñó y ahora es el responsable de la comunicación oficial.
Esa estrategia de comunicación consiste principalmente, en tratar de engañar a la gente, en utilizar la información para confundir y volver impositivo mediático los hechos negativos que la realidad hace evidentes, el de presumir de premios condecoraciones y primeros lugares, cuando la realidad refleja cosas muy diferentes y la sociedad percibe que lo que el gobierno informa, no existe en la realidad.
Por eso, algunos actores políticos, dirigentes empresariales, periodistas plurinominales (cobran en varias nominas) y defensores oficiosos del gobierno anterior, sirvieron como dijo Gómez Mont, de “tontos útiles” para justificar lo injustificable.
Ojo, el Secretario de la Función Pública se refirió únicamente a ciertos fondos federales del 2008, nunca al manejo financiero del gobierno de Mario Anguiano. Veamos:
2.- Al expresar su beneplácito por las declaraciones del titular de la Secretaria de la Función Pública (SFP), Salvador Vega Casillas, en torno al manejo de recursos federales en la entidad, los coordinadores de las fracciones legislativas de los partidos Revolucionario Institucional (PRI), del Trabajo (PT), y Nueva Alianza (Panal), coincidieron en que con ello se demuestra que las críticas de diversos actores políticos carecían de sustento alguno.
Itzel Ríos de la Mora (PRI), Alfredo Hernández Ramos (Panal), y Olaf Presa Mendoza (PT), en entrevistas por separado señalaron que las expresiones de Vega Casillas echan por tierra los comentarios que descalificaban la actuación del gobierno en materia de transparencia y honestidad.
La información proporcionada por el funcionario federal, respecto a que fueron solventadas las observaciones a las auditorias practicadas a los recursos ejercidos en 2008 en el estado, “desmiente las acusaciones que algunos actores políticos utilizaron para desvirtuar el manejo financiero de la pasada administración estatal”.
Mencionó que quienes cuestionaron la honestidad del anterior gobierno estatal y el compromiso con la transparencia de la actual administración, “lo hicieron sin sustento, mientras el secretario de la Función Pública, con sustento, informó sobre la situación de las autoridades practicadas y la solventación de las observaciones”.
Alfredo Hernández Ramos, coordinador de Nueva Alianza, señalo que el resultado positivo de la auditoria hecha por la SFP a los recursos ejercidos en el estado durante 2008, refleja el por qué la ciudadanía le tiene confianza al gobierno del estado.
“Antes de conocerse el resultado de la auditoria hecha por la SFP, hubo quien quiso dar un manejo político y sacar ventaja sobre algo que aún no se conocía, pero hay que tomarlo de quien venga, pues hay gente que se ha dedicado a querer empañar la imagen de los gobiernos”.
Destacó que sea el gobierno federal de filiación panista, el que informe sobre el positivo resultado final de las auditorias practicadas al estado, pues al ser gobernado por un partido político distinto, le da más credibilidad a ambos gobiernos.
Olaf Presa Mendoza señaló que la visita de Salvador Vega es significativa, por la información ofrecida sobre el resultado de las auditorias practicadas al gobierno del estado, pues de 36 observaciones por 166 millones de pesos, fueron solventadas 35, quedando pendiente sólo una realizada a la Capdam, por un monto de un millón 737 mil pesos.
Estimó que la información proporcionada por el titular de la SFP, “echa por tierra los comentarios malintencionados que se venían dando, en el sentido de que había malos manejos en la administración estatal anterior”. (El Noticiero 7/agosto/2010)
3.- El presidente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Martín Flores Castañeda, aseguró “que con las declaraciones del secretario de la Función Pública, Salvador Vega Casillas, fueron acalladas las voces que cuestionaban la transparencia del gobierno estatal, pues acreditan que el gobernador Mario Anguiano Moreno está comprometido con ese aspecto”.
Pero, cuidado Martín Flores, no se ha cuestionado el manejo financiero de Mario Anguiano, sino el de la administración de Silverio Cavazos.
Martín expresó: “ Es importante que una voz acreditada en esa materia haya señalado que el gobierno de Colima es ejemplo de honestidad en el manejo de los recursos públicos, lo que ubica a Colima como uno de los estados que ejercen adecuadamente las participaciones federales”.
“Agregó que con ello también queda claro que el gobierno que encabezó Silverio Cavazos hizo un manejo honesto y transparente de los recursos públicos.”
“Con esa declaración se acallan las voces de quienes de manera tendenciosa y sin sustento pretendieron generar una visión equivocada de los manejos públicos, ya que atacaron de manera sistemática obedeciendo intereses políticos y partidistas”, refirió. (El Noticiero 7/agosto/2010)
4.- Vega Casillas destacó que en el caso de Colima “no hay sanciones ni observaciones pendientes de resarcir por parte del gobierno, no obstante mencionó que la Secretaría de la Función Pública se mantiene atenta al desarrollo de la administración pública, señalando que con los gobernadores de los estados ha habido siempre un entendimiento y plena conciencia para regresar los recursos que no se aplicaron correctamente o en los tiempos establecidos”.
“El contralor ha hecho un excelente trabajo para aclarar todos los temas que teníamos pendientes con Colima, hemos estado revisando varios de los fondos y la mayoría de las observaciones ya fueron solventadas, nos fue entregada ya la documentación que soportaba las observaciones que teníamos y sólo hay un asunto pendiente, pero no corresponde al Gobierno del Estado”. (Ecos de la Costa 5/agosto/2010)
5.- Por mi parte, he cuestionado y preguntado en reiteradas ocasiones por qué se endeudaron tanto, porque la deuda del gobierno del estado llegó a ser de casi tres mil millones de pesos y, repito, mil 400 millones de pesos reconocidos por el propio gobernador, el Secretario de Finanzas y los propios diputados locales, los cuales se adeudan a los bancos. De igual manera, el Secretario de la Función Pública no dijo que eso fuera mentira y que los señalamientos en ese sentido son falsos, el secretario tampoco dijo que no se le debe a los bancos esa cantidad.
Así, pregunto a los diputados, a los periodistas y a los funcionarios que festejaron las declaraciones del titular de la Función Pública, ¿con esas declaraciones se redujo la deuda a los bancos y de ser así, de cuánto fue el decremento?, ¿el gobierno ya no está endeudado?, o , finalmente, si es falso que tenemos la deuda más alta de la historia del estado de Colima.
Y les preguntaría también: ¿Qué festejan con las declaraciones del secretario en materia de endeudamiento público?,
¡Ah, van a decir que no es por ahí, que es el manejo de los recursos, pero no se auditó el endeudamiento, ni tampoco si éste se realizó de manera correcta o no, pues este fue un tema que no se tocó, porque la secretaria de la Función Pública no está facultada legalmente para auditar el endeudamiento de los estados, pues ésta es facultad exclusiva e irrenunciable del congreso local, por eso extraña que hayan sido algunos de los diputados locales actuales quienes festejaron que el secretario de la Función Pública vino a decir que todo estuvo correcto o a suponer que auditó y validó el endeudamiento, violando la ley y tomándose atribuciones que conforme a la ley, competen sólo a los propios diputados.
Festejar por parte de los diputados este tema preocupa, porque uno podría suponer que desconocen cuáles son las funciones de la Secretaria de la Función Pública y sus propias facultades y responsabilidades, también se podría suponer que están contentos de que alguien vino a hacerles la tarea por parte del gobierno federal, en una clara violación a la soberanía del estado y en un desprecio total a los diputados y al congreso local.
Pero no, el secretario no vino a eso, ni tocó el tema del endeudamiento, ni se redujo lo que le debemos a los bancos como gobierno, los declarantes que han festinado han seguido y se han sumado a la estrategia de comunicación que les instrumentaron, de confundir mediante el festejo.
Los reto a que desmientan este punto, de no hacerlo, estarán aceptando que el tema del endeudamiento no se tocó y seguirán reconociendo, como ya lo han hecho de manera oficial, cuál es el colosal monto de la deuda pública que se tiene con los bancos.
A los mil 400 millones que se adeudan a los bancos, deben sumarse los adeudos a la Universidad de Colima, a la Secretaría de Salud, a los proveedores de medicamentos, a varios restaurantes y hoteles de Colima, y no estamos diciendo que son adeudos de Mario Anguiano, sino que es una deuda heredada, que él, con sacrificios, ha venido cubriendo a proveedores.
A los adeudos anteriores, se ha reconocido oficialmente deben añadirse más de mil millones de pesos que se deben por la planta de tratamiento de aguas residuales y que se están pagando 50 millones de pesos mensuales, los cuales van a aumentar cada mes, en perjuicio de las sanas finanzas de Ciapacov.
6.- El secretario de la Función Pública se refirió a los fondos federales que se auditaron y que corresponden a recursos que no forman parte del presupuesto del estado, sino que tienen un carácter especifico y se refieren a los programas de vivienda, del agua, de Sedesol, en los que participa el gobierno del estado, en los de alianza para el campo, de empleo temporal, de caminos rurales que, repito, no están en el presupuesto del estado y además, se refirió únicamente a esos fondos y al 2008 y por tanto, pretender festejar que auditando un año de recursos federales que maneja el estado, que no forman parte de los más de 7 mil millones de pesos del presupuesto, se pueda acreditar el buen manejo de los recursos del estado, es una falsedad y un engaño.
Repito, no se auditaron los recursos del estado, ni el endeudamiento, ni tampoco las participaciones federales.
Los recursos federales que la federación entrega al gobierno del estado para que los administre y los ejerza en el marco de su autonomía y soberanía estatal, se componen de dos rubros importantes: las participaciones federales y las aportaciones federales de los ramos del presupuesto.
Las participaciones federales se integran con los recursos que le corresponden a cada uno de los estados por concepto de los impuestos que el gobierno federal recauda y que entrega a los gobiernos de los estados para su gasto y que en el año 2008, debieron haber sido de de 3 mil millones de pesos, aproximadamente, y estos recursos no son auditables por el gobierno federal, porque en el momento que se le entregan al estado, dejan de ser recursos federales y se convierten en recursos estatales, que únicamente los audita la legislatura del estado. De estos recursos se paga la nómina, el gasto corriente, obra pública, deuda, etc., etc., de estos recursos, una parte, 20 o 22%, se le entregan como participación a los municipios, que es como cubre sus nóminas y al igual que el estado, los gastan en lo que les aprueba el cabildo o el congreso y no son auditados por la Secretaria de la Función Pública.
Las aportaciones federales son recursos federales que aprueba el congreso de la unión para cubrir la nómina de educación, salud, seguridad pública, infraestructura municipal y estatal, y son recursos que el estado debe ejercer en los rubros que están etiquetados y que pueden ser, en un momento dado, auditados por la Auditoria Superior de la Federación, instancia dependiente de la Cámara de Diputados, pero nunca por la Secretaría de la Función Pública, estos recursos debieron haber sido, también, de 3 mil millones de pesos aproximadamente y corresponden al ramo 28 de participaciones a entidades federativas y municipios.
En conclusión, el secretario de la Función Pública no avaló el manejo de la deuda porque no la auditó, ni los seis mil millones de pesos aproximadamente que en el 2008 el gobierno federal entregó al estado a través de participaciones y aportaciones federales, repito, únicamente se refirió a fondos federales específicos que nada tienen que ver con el presupuesto del estado.
“Los tontos útiles” del endeudamiento han cumplido la encomienda, por mi parte, tan sólo les pregunto: ¿qué festejan?, ¿esta declaración va a darle solvencia financiera al gobierno estatal?, porque de eso se trata: seguimos igual de endeudados y sin dinero.
A Propósito…
1. Debo decirle a René González, Coordinador general de Comunicación Social del gobierno del estado, que no siga filtrando falsedades a los medios que les paga, con la intención de perjudicarme o quedará claro que lo hace por indicaciones de alguien más y habrá, de mi parte, la respuesta pertinente.
¡Qué irresponsabilidad oficial!, como si no tuvieran problemas que resolver.
2. Mañana continuamos.
www.aproposito2004.blogspot.com
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